Macario Wars II, Preludio: Azimut

No podría traer peores noticias hoy. Nuestros temores se confirman, nuestras pesadillas cobran vida. Macario no está muerto. Aquel que fue derrotado por los grandes guerreros de la humanidad ha vuelto sediento de venganza y para ello ha acudido a un ancestral dios de la destrucción...
-> Azimut, hermano de Esturri, hijo de Puta, son of Many, está entre nosotros. Las naciones caen a su paso, civilizaciones sucumben en cuestión de minutos a su rabia. Nada puede hacerse... ¿Nada? ¡NO! Nuestros héroes, concienciados del peligro que se avecina, castigan día y noche su cuerpo en un entrenamiento intensivo...
-> ¡Seréis hijos de p...! ¡He dicho entrenamiento intensivo! ¡Dejad la puta Play que viene Azimut! ¡Que nos mataaaa!

Ehem, sigamos...Para superar a Azimut sería necesario un entrenamiento intensivo bajo las órdenes de los dos grandes maestros de las artes marciales: Kageshira-Sama y Anónimo Sensei. Por desgracia, ambos habían abandonado cualquier expresión de violencia y vagaban por el mundo buscando la iluminación espiritual. Usando los poderes de Cassie, la mentalista particular del grupo, encontraron a Kageshira en un burdel asiático rodeado de... "iluminación espiritual".

Bien informados, descubrieron que Kageshira-Sama llevaba años tras la pista de un lienzo con la imagen de su amada: Liliana Vess, a la que Azimut había encerrado en el propio dibujo de por vida. Cassie, tras viajar por el plano astral a la caza de alguna pista, tropezó consigo misma y la encontró debajo de una piedra.-> La alegría de Kageshira-Sama era indescriptible.

-> Con fuerzas renovadas, se dispuso a mostrar su técnica definitiva: el Origami Celestial inverso. Esta habilidad permitía a su usuario deshacer cualquier estructura organizada, como un organismo, en un millar de estructuras pequeñas, como una célula, reduciendo al enemigo a un charco de gelatina humeante. Incrédulo, Baptiste pidió una demostración. Una pobre caja pagó el precio de su osadía.
-> "¡Hai!" Exclamaba el maestro. Baptiste reía incrédulo.
-> "¡Kya!" El semblante de Baptiste reflejaba el horror por la masacre presenciada...-> "¡Soru!" Poco quedaba ya de la pobre caja...

-> "¡Yataaaaa!"
Lo que en un principio fue un paralelepípedo perfecto, ahora no era más que un montón de papeles rasgados colgando flácidamente. Nuestros héroes tomaron nota de este asombroso poder, intentando no mirar a las entrañas de la fallecida caja, y partieron en pos de nuevas enseñanzas en manos del hombre que una vez los entrenó: Anónimo Sensei.

Y mientras tanto, el mal personificado planificaba la destrucción de todo lo conocido. Un destello de preocupación iluminaba su rostro al saber que aquellos a los que debía destruír crecían en poder.
Un destello más bien breve...-.-U

Pero volvamos a la historia. Buscando retos mayores, se vestía con ropajes pesados, corría descalzo sobre espinas, trepaba paredes imposibles y cargaba su cuerpo con toda clase de taras para encontrar algo que le resultase difícil de hacer. Sabbo, Son_eu y Kaos lo encontraron en una caverna asfixiante, en la que incluso caminar era difícil. Anónimo parecía moverse sin dificultad alguna.

-> "Mortales que a mí venís. Nada tenéis que me plazca. Nada podéis ofrecerme que me satisfaga. Mi poder es ilimitado. Mi sabiduría infinita. ¿Qué puedo desear que no tenga ya?". Fue entonces cuando el genio de Son_eu cambió el curso de la historia: "Mmmmm, ¿dinero y mujeres?". El semblante de Anónimo se tornó en una felicidad nunca vista antes al ver a Cassie portando un cheque por valor de un Porrón de Euros.
-> "Debes saber, mortal, que poseo ya una Anónima que me satisfaga y que no necesito nada material... Pero aceptaré gustoso el cheque y un beso para la foto". El trato estaba hecho y la esperanza crecía.
-> "Escucha mis palabras, tú que te haces llamar Sabbo. Mi técnica es la motivación instantánea. Aquel que sepa usarla adquirirá la fuerza y el conocimiento que precise en cada instante sólo con oír la frase: "¿A que no hay huevos...?" Inténtalo. Aprieta mi mano como si me saludases. Ahora yo te digo: "¿A que no hay huevos a dar la mano más fuerte?"
Desde entonces, Anónimo Sensei es conocido como Anónimo Sensei el manco. Habiendo enseñado todo lo que podía a Sabbo, Son_eu, Cassie y Kaos, Anónimo partió hacia el horizonte pensando en su próximo retiro como Sensei y en su futuro ingreso en el oficio de sus sueños: Camionero.

Así, los héroes se reunieron nuevamente en su base, sólo para descubrir horrorizados que Azimut había dejado una nota de aviso. McGyver, el héroe definitivo que había vencido a Macario con la ayuda del resto, yacía inconsciente en una crisálida de animación suspendida, con su cuerpo terriblemente herido.-> Parecía obra del propio Azimut. La alegría se desvaneció, las fuerzas se consumieron. Su mayor enemigo se aproximaba, el primero y más poderoso de ellos había caído y sólo quedaba un mes por delante antes de la batalla decisiva... El dios de la destrucción aguardaba impaciente la orden de Macario para comenzar la masacre.
CONTINUARÁ EN... MACARIO WARS II: AZIMUT ARRIVES.