ya sé que corremos el riesgo de que por intentar darle algo de profundidad a parte de lo que colgamos aquí esto se parezca un club tipo "los frikis también lloran"...
Pero es que puede que sea cierto.
La verdad es que últimamente no estoy bien... como muchos de por aquí. Que ya sé que el que más o el que menos tiene sus jodiendas privadas...
en fín, este texto tiene casi dos años y sigue siendo yo, en cada frase. La verdad es que para haber pasado tanto tiempo es una verdadera p***da que aún no haya sido capaz de solucionar nada...pero en fin... a ver qué os parece:
(este texto es una adaptación de un texto de David Barreiro, publicado en la revista Monográfico)
Vida en jaque
Rosa supo que había madurado una tarde de marzo, cuando se sorprendió esquivando los charcos olvidados por la lluvia en las aceras. Hasta entonces soñaba que no despertaba y que estornudaba canciones.
Desde aquel día, Rosa lleva los zapatos intercambiados y tiende sus ojeras al sol en la cortina de la ventana. Mira por el retrovisor cómo se suceden días iguales mientras su cabeza martillea con la cefalea diaria, y cada lunes se despliega un toldo gris sobre su pecho.
Hace años que no visita la playa de su niñez y cuenta las estrellas con calculadora.
Anda a pasos largos, deprisa, escapando del monstruo que le sigue a todas partes. Malhumorada.
Rosa guarda en un cajón los panfletos zurdos, de izquierdas, de aquella época en la que tenía ideales, a la espera de que una posible y futura hija decida luchar la guerra que ella perdió.
Se odia en el espejo. Evita mirarse. Ensaya posturas en las que no se ven sus caderas. Las tiene memorizadas. Sabe caminar usando sólo esas posiciones y hablar sin decir nada. Sabe hacer siempre el mismo chiste y que cada vez suene diferente, aunque en el fondo de su corazón sepa que ya lo ha dicho antes.
Hace unos años que Rosa piensa que se ha enrocado en la vida y trata de recuperar el tiempo perdido cuando se reúne con su nuevo amor. La última vez quedaron para pasear y él le habló del crédito, de la luz, del dinero y de las mariposas. En ese momento Rosa debía estar estudiando. Se aman y al menos eso es algo. Mucho.
Rosa se viste el traje de gala para otear el horizonte porque sabe que cada vez tiene menos tiempo para hacerlo, y pierde aún mas tiempo de estudio en recopilar y escribir la poesía que le hace sentir que aún no ha muerto del todo. Siente que lo que dejó atrás ya pertenece a otro.
Desde hace varios años piensa que las fotografías son traicioneras porque siempre te demuestran que tu vida no merece ser retratada y aunque cree en el destino sabe que el suyo no le depara nada bueno.
Su idea de mejorar es conseguir una firma pulcra cuando renueva su DNI.
Cada mañana Rosa se despierta con un pinchazo en la espalda causado por las agujas del reloj y sabe que el día que está por llegar ha sido ya inventado.
Ya no llora. Y sabe que es una buena persona. Al menos eso es algo.
Desde aquel día, Rosa lleva los zapatos intercambiados y tiende sus ojeras al sol en la cortina de la ventana. Mira por el retrovisor cómo se suceden días iguales mientras su cabeza martillea con la cefalea diaria, y cada lunes se despliega un toldo gris sobre su pecho.
Hace años que no visita la playa de su niñez y cuenta las estrellas con calculadora.
Anda a pasos largos, deprisa, escapando del monstruo que le sigue a todas partes. Malhumorada.
Rosa guarda en un cajón los panfletos zurdos, de izquierdas, de aquella época en la que tenía ideales, a la espera de que una posible y futura hija decida luchar la guerra que ella perdió.
Se odia en el espejo. Evita mirarse. Ensaya posturas en las que no se ven sus caderas. Las tiene memorizadas. Sabe caminar usando sólo esas posiciones y hablar sin decir nada. Sabe hacer siempre el mismo chiste y que cada vez suene diferente, aunque en el fondo de su corazón sepa que ya lo ha dicho antes.
Hace unos años que Rosa piensa que se ha enrocado en la vida y trata de recuperar el tiempo perdido cuando se reúne con su nuevo amor. La última vez quedaron para pasear y él le habló del crédito, de la luz, del dinero y de las mariposas. En ese momento Rosa debía estar estudiando. Se aman y al menos eso es algo. Mucho.
Rosa se viste el traje de gala para otear el horizonte porque sabe que cada vez tiene menos tiempo para hacerlo, y pierde aún mas tiempo de estudio en recopilar y escribir la poesía que le hace sentir que aún no ha muerto del todo. Siente que lo que dejó atrás ya pertenece a otro.
Desde hace varios años piensa que las fotografías son traicioneras porque siempre te demuestran que tu vida no merece ser retratada y aunque cree en el destino sabe que el suyo no le depara nada bueno.
Su idea de mejorar es conseguir una firma pulcra cuando renueva su DNI.
Cada mañana Rosa se despierta con un pinchazo en la espalda causado por las agujas del reloj y sabe que el día que está por llegar ha sido ya inventado.
Ya no llora. Y sabe que es una buena persona. Al menos eso es algo.
5 Matices precisos:
"NO, NO, NO, NO,
I DON'T SMOKE IT NO MORE,
I'M TIRED OF WAKING UP ON THE FLOOR"
(Ringo Starr, "No No Song")
Lo primero decir que es una putada que le toque el maldito spam a un texto tan bonito, parece que no tienes suerte con las primeras respuestas a tus textos xD.
No se que dirá nuestro amado administrador, pero quiero suponer que este blog es para expresar lo que queremos, desahogarnos en lo alegre y también en lo triste. Que las cosas siempre son mejores cuando las compartes con tus amigos. Las buenas más buenas y las malas menos malas. Respecto al texto en si... poco puedo decir, porque tú lo explicas todo perfectamente (y con una redacción envidiable :) ).
Es verdad que la maldición de ser un ser adulto consciente, capaz de darse cuenta de como es realmente su vida y lo que le rodea, puede hacerte mucho daño. Y la vida nunca es lo perfecta que nos gustaría, pero "perfecto" no es más que un concepto utópico y por lo tanto inalcanzable. Recuerda que cuando estás deprimido ves todo mucho más negro de lo que es en realidad.
Así que te insto a seguir intentando mejorar tu vida poco a poco, paso a paso, como se hacen las cosas importantes; y por supuesto apoyándote en las personas a las que les importas de verdad. Y si algo te deprime, desahógate con tus amigos y sigue adelante, sobre todo disfruta de esos pocos momentos de alegría que, en esencia, constituyen la vida.
Pero todo eso seguro que tú ya lo sabías.
Lo malo de esto es que si pongo la moderación de comentarios, todos los que posteeis tengo que aprobarlos yo antes y no me gusta la idea, prefiero la libertad y aguantar estas tonterías.
Ahora lo importante. El blog está para nosotros, si os dais cuenta el que tenga 11 colaboradores es algo desconocido en la blogsfera, pero gracias a eso se llena de variedad. La gente a la que he invitado es gente que me importa y si no creyese que pueden aportar, aunque sea contando que se han merendado un bocata de nocilla, no serían dementes consentidos.
Y ahora lo verdaderamente importante: el relato. La madurez es un monstruo inventado por las personas para matar las ilusiones. ¿Contenemos las ganas de pisar los charcos porque creemos que es cosa de niños? Lo hacemos porque hemos matado a nuestra parte infantil. Cuándo fue la última vez que te paraste a pensar: "¿qué hago ahora?" La responsabilidad, las ostias, el ser lo que otros quieren en vez de nosotros mismos, pensar que está todo inventado. ¿Porqué, cojones, porqué?
Es mentira. Pisa los charcos, corre hasta que revientes, escápate de ti misma. Mira el mar que tanto te gusta: por el pasa la eternidad y no por ello deja de ser bonito, de cambiar, de descubrir nuevas cosas. No dejes que te maten, el no llorar no hace a nadie más fuerte, sólo impide reconocerse a uno mismo.
Y lo último y no lo menos importante: cuando mires al cielo sin calculadora prueba a ponerte las ojeras. Contrastará más en tus ojos el brillo de las estrellas.
Anímate y sobre todo, no dejes de escribir. Al fin y al cabo, para eso somos (y los monstruo, por mucho que digan, no son) nosotros.
Que bonito. Es que se me saltan las lagrimas. Porque como dices al principio los frikis tambien lloramos.
La vida es asi, nos hacemos unas ilusiones, que la mayoria de las veces no se cumplen, aunque seguimos teniendo una pequeña esperanza, de que antes o despues, por los avatares del destino, nuestros sueños y nuestras esperanzas se vean cumplidas.
Mientras tanto, lo unico que nos queda, es que somos buenas personas, y el consuelo de que hemos luchado por aquello en lo que creiamos.
me gusta tu respuesta, yokeem...
¿Cómo era eso? "Todos somos Rosa en nuestro interior"... (sobre todo yo :P)
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